Encabezado por el miembro del Buró Político y primer ministro Manuel Marrero Cruz; Rogelio Polanco Fuentes, miembro del Secretariado del Comité Central del Partido y jefe de su Departamento Ideológico, y Alfonso Noya Martínez, presidente del Instituto Cubano de Radio y Televisión (ICRT), el espacio de debate tuvo lugar ayer en el Ministerio de Comunicaciones
Por mucho que se pretenda resumir, resulta en extremo difícil debatir en pocas horas el año de trabajo ininterrumpido de una institución como la que agrupa el desempeño de la radio y la televisión cubanas. Sin embargo, quien haya participado en su balance correspondiente a 2021, podrá haber advertido el aliento de emprendedora valentía que habita en aquellos profesionales que hacen posible la maravilla de esas transmisiones.
Encabezado por el miembro del Buró Político y primer ministro Manuel Marrero Cruz; Rogelio Polanco Fuentes, miembro del Secretariado del Comité Central del Partido y jefe de su Departamento Ideológico, y Alfonso Noya Martínez, presidente del Instituto Cubano de Radio y Televisión (ICRT), el espacio de debate tuvo lugar ayer en el Ministerio de Comunicaciones, en una jornada en la que el Jefe de Gobierno reconoció la labor de los trabajadores de la radio y la televisión en defensa de la Revolución Cubana, en un escenario de pandemia, cuando se ha recrudecido como nunca antes el bloqueo económico y la guerra ideológica contra la nación.
Tras resumir las circunstancias vividas en la Isla en los dos últimos años, y describir, además, el contexto internacional en que tiene lugar la hazaña protagonizada en todos los órdenes por el país para continuar existiendo, el Primer Ministro conversó con un auditorio que conoce al dedillo la necesidad de persistir en la defensa de la verdad de Cuba.
En su disertación se refirió a la brutal campaña mediática diseñada por Estados Unidos contra la Revolución, que busca a toda costa confundir y manipular al pueblo y desprestigiar al país y a sus dirigentes. Contra ella se erige una batalla que se libra con la verdad, y a la que han contribuido y deben seguir contribuyendo la radio y la televisión cubanas.
En momentos difíciles nuestros dirigentes le pidieron sacrificios a nuestro pueblo, recordó, y si bien Fidel es Fidel y Raúl es Raúl, hoy existe una continuidad, «y tenemos la alta responsabilidad de continuar esas obras», destacó, y determinó como la tarea crucial que hay que garantizar, la de que el pueblo nunca pierda la confianza en sus dirigentes ni en la Revolución, para lo cual «hace falta todo lo que ustedes han hablado aquí», dijo.
Marrero Cruz razonó con los presentes que si mañana tuviéramos una pandemia mayor habría que extender los horarios de la televisión y la radio, pues sería la herramienta principal para llevar la información al pueblo, y señaló la necesidad de fortalecer los telecentros, dada la importancia de la información local, independientemente de la brillante información nacional que se ha ofrecido desde que empezó la pandemia. Exhortó a valorar las experiencias de lo que está sucediendo de cara al silenciamiento de determinados medios de comunicación y la prevalencia de otros, frente al conflicto en Ucrania, y les recordó que, durante estos dos años, esos servicios, la radio y la televisión, pudieron entrar a los hogares, a pesar de las circunstancias epidemiológicas.
En un aparte, encargó al instituto incrementar sus ingresos, hacer un análisis para conseguirlo, puesto que se hace necesario, independientemente de que seguirá siendo una institución presupuestada que garantizará la información y el entretenimiento al pueblo.
Marrero Cruz recomendó terminar de decirle adiós al ICRT y dar la bienvenida al Instituto de Información y Comunicación Social, que tendrá un alcance mucho mayor, pues se le otorga la rectoría de implementar la política de la información y la comunicación. Con el perfeccionamiento se logra un mayor fortalecimiento de las direcciones de la televisión y de la radio, y queda bien definido cuáles son las funciones de la dirección del instituto desde el punto de vista gubernamental, destacó.