Las tres batallas del 2021.
- citma
- Ciencia, Tecnología y Medio Ambiente
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Esta (la Nº25) es la última nota del 2021 y es ineludible usarla para resumir el mensaje de lo que apreciamos ha sido esencial en este difícil pero también glorioso año.
Los cubanos, cada cuál desde su puesto, con sus ideas y sus valores, pero esencialmente todos, hemos estado involucrados en tres grandes batallas que deciden nuestro futuro:
El control de la epidemia de COVID.
El enfrentamiento a la agresión mediática y cultural contra nuestro proyecto de sociedad.
El desarrollo económico, aún en el contexto del bloqueo.
Nos plantearon enormes amenazas:
La primera amenazaba nuestra salud, la segunda, nuestro pensamiento, la tercera, nuestro sustento material. Las tres juntas, amenazaban nuestra Nación.
En las dos primeras vencimos, indiscutiblemente. Hay que consolidarlas y proyectarlas al futuro, porque pueden continuar, pero son esencialmente victorias.
En la tercera logramos resistir, que no es poca cosa, y es el paso indispensable para vencer, pero la victoria grande nos exige todavía mucho esfuerzo e inteligencia.
El control de la epidemia de COVID-19 se logró este año con la biotecnología, la ciencia, la fortaleza, experiencia y universalidad de nuestro sistema de salud, y la culta participación del pueblo y sus instituciones.
Validó la fertilidad de la estrategia de desarrollo científico implementada por la Revolución durante décadas, y la importancia de las conexiones entre la ciencia y la producción que se construyeron desde los momentos fundacionales del Polo Científico, bajo la conducción de Fidel.
Validó el concepto de que la salud no puede ser mercancía, y que las instituciones presupuestadas o empresariales de las que dependen los servicios de salud tienen que ser propiedad socialista de todo el pueblo, no solo por razones morales (que es lo principal) sino también por razones de eficacia.
Esta batalla dejará experiencias para el perfeccionamiento y desarrollo de ambos actores, la industria y el sistema de salud, que debemos aplicar de inmediato pues el contexto mundial de pandemia continuará en el 2022.
La agresión mediática y cultural, con la que, este año especialmente, se intentó dividir al pueblo y erosionar su capacidad colectiva de respuesta a los retos del momento, fue derrotada. Su implementación y financiación (sabemos bien por quienes), en combinación con el reforzamiento del bloqueo, precisamente en los momentos en que enfrentábamos la peligrosa epidemia, pasará a la historia como una de las mayores inmoralidades políticas de este siglo.